Aplica la crema generosamente.
Si tienes la piel sensible, usa un producto con base de crema y evita los protectores solares con tretinoina que seca más la piel. Busca una crema sin perfume e hipoalergénica si tienes algún tipo de alergia a los productos de la piel. Las cremas solares resistentes al agua son buenas si vas hacer deporte o nadar.
Aplicación de la crema solar.
Ponte protección solar al menos una vez al día y utiliza una cantidad adecuada. Limpia la piel antes de aplicar el producto. Después aplica la crema hidratante y el maquillaje encima de la protección solar. Proteger la piel al 100% de los rayos solares es lo más importante, y dependiendo de cómo la utilices podrás evitar que tu maquillaje se vea derretido y estropeado.
La base de maquillaje no es la mejor opción para el verano porque su textura es un poco densa y no resulta nada cómoda para esta época del año. Mejor elegir una crema hidratante con color, que unifique el tono de la piel y cubra las imperfecciones, pero de una forma muy ligera y con un resultado natural.
Elige una sombra de ojos en crema, durante el verano es mejor evitar las sombras en polvo y apostar por las texturas en crema.
Mucho brillo en la piel.
En verano nunca lleves el rostro mate, las pieles en verano son más luminosas. Para ello utilizamos iluminadores para dar brillo a zonas estratégicas del rostro que queremos resaltar: frente, pómulo alto, barbilla o por encima arco de Cupido.
Hablar de verano, es hablar de calor. Con la subida de las temperaturas, el único producto que se convertirá en un básico imprescindible será el protección solar.
Protección solar.
Las arrugas, las manchas y una textura desigual en la piel no son los efectos inevitables del envejecimiento, sino que a menudo constituyen la causa de una exposición excesiva al sol. La sobreexposición a la luz solar también puede provocar cáncer.
Tomar demasiado el sol es el peor enemigo de la piel. La única forma de prevenir el envejecimiento prematuro y el daño que sufre la piel debido a la sobreexposición es alejarse del sol del mediodía cuando sea posible e importante utilizar siempre la crema solar apropiada. Elige una crema solar que proteja contra los rayos UVA y UVB.
Maquillaje y calor pueden ser compatibles si adaptamos productos y rutinas a las altas temperaturas. Con la llegada del calor y las altas temperaturas, la humedad y las pieles bronceadas, el maquillaje puede convertirse en algo complicado. Por eso, la clave para lucir espectaculares también en verano es adaptar nuestro maquillaje.
Pero, ¿Cómo hacerlo?
Piel limpia, protegida e hidratada. Una piel hidratada es = a un maquillaje de acabado perfecto.
Máscara de pestañas de larga duración. Lo mejor es apostar esta temporada por productos waterproof resistentes al agua.
Muy importante utilizar prebases para evitar el efecto sudor y sobre todo aplicar en la zona Y.
Labios jugosos. El sol reseca muchísimo los labios, así que es imposible mantenerlos bien hidratados, un bálsamo hidratante con color es lo suyo.
Lo principal para que el maquillaje se mantenga es usar productos de larga duración. Apuesta por un buen fijador. Tener un fijador de maquillaje es vital para días de calor.
¡Recuerda que menos es más!
Llevar un exceso de maquillaje cuando hace calor no siempre es la mejor opción, ya que es un momento en que, por el calor, los poros de la piel se abren para transpirar. Así que elige que quieres resaltar¿piel? ¿Ojos? ¿Labios?
Un maquillaje ligero en verano es lo que mejor se ve, y lo que mejor le viene a tu piel.
Por Ilma Gurklyte
Modelo y Maquilladora
