Ya sea por pura seguridad o simplemente para trabajar más cómodo, la correa para la cámara es imprescindible a la hora de trabajar. Pero ¿qué son?, ¿cómo se utilizan?, ¿para qué sirven?, estas y otras preguntas, te las responderemos a continuación.
Qué son las correas para cámara
Las correas de cámara son accesorios de sujeción necesarios para trabajar con seguridad tanto en exteriores como en interiores.
La recomendación general de todos los profesionales y expertos en equipos fotográficos es que siempre la utilices, aunque sea cuando vas a hacer una o dos fotografías simples, como medida de prevención y para tener las manos libres en caso de una eventualidad.
Existe una correa para cámara ideal para cada fotógrafo. Sí, pensamos que sí. Los diferente modelos de correas en el mercado permiten que quieras expresar tu creatividad o simplemente sentirte más seguro, pero lo mejor es que sepas para qué sirven exactamente.
¿Para qué sirven las correas para cámara?
Básicamente son más que un accesorio de fotografía, ya que te permiten trabajar con tu cámara con mayor seguridad. Estés donde estés. Por ello siempre es recomendable tenerla en la cámara, ya que nunca sabrás cuando te surgirá un descuido o necesites tener las manos libres o bien acceder a tu cámara lo más rápido que te sea posible.
Los que están comenzando en la fotografía no deberían tomarlo muy a la ligera, pues los accidentes son muy comunes cuando estás en pleno trabajo. No es una cuestión de precio, sino más bien de cómo vas a usarla, de lo cómodo que vas a sentirte cuando te la coloques al hombro o espalda, del tipo de material del que está hecha y sobre todo de la practicidad y facilidad de funcionamiento.
Muchos ahorran algunos euros al no comprarlas y después resulta que deben gastar el doble en equipo nuevo cuando se cae y o rompe.
Tipos de correas de fotografía que puedes encontrar
Cuando piensas en una correa de fotografía, probablemente piensas en la típica que muchas veces viene incluida con la cámara que compraste (pero presta atención a la calidad que tiene comparada a una que puedes comprar tú por otro lado).
Las hay tipo bandolera, de arnés, con bolsillos, correas doble para dos cámaras, de neopreno, de mano para empuñadura, para bolso, de acceso rápido, etc. ¡Y no estamos hablando de los diferentes materiales que puedes encontrar en el mercado!
Nylon, neopreno, cuero, telas resistentes trenzadas, poli piel, en infinidad de colores y configuraciones.
A continuación de planteamos algunos modelos que pueden serte de interés entre la infinidad de modelos que podrás encontrar en el mercado.
Correa Sling Strap con bolsillo y zapata
Esta correa de acceso rápido es cómoda gracias al acolchado y muy útil debido al pequeño bolsillo con cremallera que incluye. Puedes guardar tarjetas de memoria, pilas, o cualquier cosa de similar tamaño que puedas llegar a necesitar mientras te dedicas a realizar las fotografías.
Cómo elegir la correa para cámara
Las diferentes correas son muy sencillas de utilizar, algunas se enganchan a las hebillas en los laterales de la cámara y las más novedosas, tipo bandolera, ya traen sus propias zapatas o enganches para colocarse en la base de cualquier cámara. Esta es una de las cuestiones a tener en cuenta a la hora de comprar una nueva correa.
Por otro lado, está el tema de la comodidad y la salud. ¿Has notado que con la correa que usas habitualmente te duele la espalda, los hombros y/o el cuello? Pues esto está directamente relacionado con los materiales con que está hecha la correa, la posición en que las sostienes y el tiempo que tienes la/s cámara/s colgadas al hombro. Fíjate que la que elijas tenga ajuste seguro y una buena longitud, pero también que esté hecha de materiales resistentes y a la vez cómodos.
Otra cuestión a tener en cuenta es el acceso a la cámara. Muchas veces, quieres sacar una fotografía impulsivamente, pero la tienes tan resguardada y segura con la correa que pierdes la posibilidad (por ejemplo, en eventos, foto reportajes o ante la aparición repentina de un animal en la naturaleza). Busca modelos de correas y arneses que te permitan tener, tanto seguridad como fácil y rápido acceso a tu cámara.
En cuanto a la capacidad de llevar accesorios o colocar dos cámaras, eso es absolutamente personal, ya que las necesidades de un fotógrafo pueden no ser las mismas que las de otro. No es necesario que gastes en un producto muy caro si tus necesidades son eventuales o llevas poco peso. No necesitas las primeras marcas del mercado aunque si un mínimo de durabilidad, aguante y confort.
Si por el contrario te dedicas a la fotografía, haces largas caminatas, busca una correa de buena calidad, con capacidad de absorción de movimiento alto como el neopreno o que disponga de mucho acolchado.
Los arneses para cámara son los más llamativos visualmente, y no a todos nos gustan, pero debemos pensar que la comodidad es lo primero, pues si no estamos cómodos, ni accedemos rápido a la cámara o estamos doloridos perderemos la oportunidad de conseguir la foto que queremos. Esto es más notorio cuanto más tiempo tengamos colgado o llevemos el equipo fotográfico encima nuestro.
Ten en cuenta que, si tus aspiraciones son llegar a ser un profesional en eventos o en situaciones que requieren el máximo de movilidad, lo mejor es que valores hacerte con un arnés o una correa rápida tipo bandolera, que te darán una gran comodidad y beneficiará tu rendimiento a la hora de trabajar.
Con los arneses podrás guardar algunos accesorios necesarios para tu trabajo como baterías, tarjetas de memoria, etc., y no corres el riesgo de los peligrosos balanceos de la cámara al caminar o correr.
Por los años que llevamos trabajando con las diferentes correas de cámara del mercado y habiendo probado más de 20 diferentes como usuarios profesionales, en nuestra opinión las más apropiadas han sido por orden de comodidad con una sola cámara DSLR y objetivos zoom.